El crimen fue en ocasión de robo en la casa de una mujer de 90 años, en la localidad bonaerense de El Talar. Detuvieron a dos hermanos de 20 y 22 años, vecinos y conocidos de la víctima.

Una mujer de 90 años fue asesinada a golpes y de un tijeretazo en la nuca durante un robo en su casa de la localidad bonaerense de El Talar, en el partido de Tigre, y por el crimen detuvieron a dos hermanos de 20 y 22 años, el menor de los cuales reconoció ser el autor del hecho y desligó al otro, que se declaró inocente, informaron este lunes fuentes policiales y judiciales.
De acuerdo con los investigadores, los dos acusados eran vecinos y conocidos de la víctima, identificada como Ángela Nuccio (90), quien era jubilada pero trabajaba como podóloga.
Según las fuentes, el crimen se descubrió este domingo, alrededor de 13, en la casa de Nuccio, situada en la calle Gelly y Obes 2890 de El Talar, en la zona norte del conurbano, a una cuadra de la comisaría 5ta. de Tigre.
La víctima fue encontrada tendida boca abajo en el piso de un baño, con golpes en la cabeza, pero además, tenía clavada en la nuca una tijera metálica, precisaron las fuentes.
Según el forense que revisó el cuerpo en la escena del crimen, la data de la muerte sería de alrededor de las 10 de la mañana de este domingo, aunque ese horario se precisará con la autopsia.
El o los asesinos, además, robaron dinero y varios elementos de valor de la vivienda, cuyos ambientes fueron hallados completamente desordenados.
Por su parte, efectivos de la comisaría 5ta. de El Talar, de la Estación de Policía Departamental de Seguridad Tigre y de la Subdelegación Departamental de Investigaciones (Sub DDI) de la jurisdicción, comenzaron a trabajar el caso bajo las órdenes del fiscal Santiago Jaimes Munilla, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) de El Talar.
Tras una serie de tareas de campo y del análisis de las cámaras de seguridad del Centro de Operaciones Tigre (COT), los investigadores identificaron a dos sospechosos que habían sido vistos ingresar a su casa con dos televisores como los que habían robado en la vivienda de la víctima.
«Son hermanos de distinto padre, viven a 20 metros y conocían a la anciana de toda la vida. Son vecinos de la víctima y de la comisaría, unos verdaderos atrevidos», dijo a Télam un jefe policial que trabaja en la causa.
