También se incorporaron efectivos de Gendarmería y Prefectura.

La búsqueda incansable de Guadalupe Lucero, la niña de 5 años desaparecida en San Luis, continúa con rastrillajes en la localidad de Potrero de los Funes y en la zona sur de la capital, en los que participan efectivos de Gendarmería y Prefectura, que arribaron este miércoles a la zona. El padre de la pequeña, en tanto, convocó de forma particular a un grupo de 8 ex policías que junto con 4 perros entrenados realizan este jueves un rastrillaje en el barrio 544 viviendas, donde la nena fue vista por última vez.
Según confirmó el abogado de la familia, Héctor Zabala, el operativo organizado por el padre, Eric Lucero, se lleva adelante “con perros civiles entrenados por ex policías» del grupo Halcón y Alianza canina «que accedieron a hacer de manera gratuita la tarea ante el pedido desesperado del padre de la niña”. Se trata de un equipo de canes especializados en “grandes áreas, seguimiento de rastros y funcionales” que “ha tenido éxito en la búsqueda en casos resonantes».
“Llevo 10 días esperando una respuesta de la policía”
Yamila Cialone, madre de Guadalupe, explicó este jueves que la familia decidió hacer una búsqueda particular porque “no se nos cedía el apoyo”. “Conmigo se siguen contactando pero es el gobierno… No se quién es el que lo maneja eso, pero no nos cedían apoyo, entonces lo hicimos particular”, dijo a los medios televisivos.
“Llevo 10 días esperando una respuesta de la policía”, agregó quebrada, sobre la efectividad de los operativos oficiales. Desesperada ante la falta de información sobre el paradero de su hija, este jueves decidió acercarse a hablar con el juez para plantearle que llaeva «10 días sin noticias de Guadalupe». «El magistrado me dijo que las respuestas que yo iba a buscar él no las tenía”, lamentó la mujer.
Consultada sobre la llamada que recibió desde un número con característica de México, en la que dijo haber escuchado de fondo la voz de su hija, Yamila dio a entender que los funcionarios a cargo del caso la trataron de loca. “Llamaron a la ambulancia y me doparon”, contó.
Georgina, la madrina y tía de la pequeña, coincidió en que la voz que se escuchó durante la llamada era la de su sobrina. «Es ella, pero obviamente no se siente bien. Se siente como que está dopada. Es horrible, porque sabemos que es ella y no está bien. En una parte dice ‘mami, vení’. ¿Entonces, qué? Si no es ella, ¿quién es? ¿quién puede hacer esa monstruosidad y poner a su hijo a que nos extorsione así? No creo”, planteó.
“Amenezaban con la vida de Guada y decían cosas horribles. Todos (escucharon). Incluso ella (por Yamila) tiene una aplicación que graba apenas empieza una llamada y tenemos la grabación y es horrible», reveló. Una vez finalizada la comunicación, «pusimos los audios de Guada una y otra vez, los audios que ella tiene, y lo comparamos y sí, para mi es Guada”, agregó.
Cómo sigue la búsqueda
Este jueves, mientras tanto, continúan los rastrillajes a cargo de la policía de la provincia de San Luis, que durante la mañana se centraban en la localidad de Potrero de los Funes, ubicada a 20 kilómetros de la capital, y en la zona Sur de la ciudad de San Luis. Participan de los operativos dos perros rastreadores y miembros de Gendarmería y de Prefectura que arribaron a la provincia el miércoles por la tarde.
Durante la noche del miércoles, además, se realizó un operativo policial en un departamento ubicado en la calle Junín al 1.200 de la ciudad de San Luis. De acuerdo con las fuentes del caso, efectivos de la Policía Científica y perros rastreadores cortaron el tránsito entre Caseros y Mitre para desarrollar una exhaustiva búsqueda en el lugar donde viven una prima de Yamila y su pareja, ambos kinesiólogos. No se encontraron elementos vinculados a la desaparición de la niña, pero se produjo un hallazgo de drogas que terminó con la detención del joven profesional, que luego fue liberado.
Tanto en los rastrillajes como en las labores investigativas, la provincia está trabajando de forma coordinada con el Ministerio de Seguridad de la Nación y ha recibido el apoyo de la provincia de Buenos Aires, Santa Fe, Córdoba, La Pampa, San Juan y Mendoza, que enviaron recursos técnicos y humanos.
El caso
Guadalupe desapareció el pasado 14 de junio cerca de las 19.30, mientras jugaba a las escondidas con su prima de 3 años en la vereda de la casa de la menor. Fue la nena de 3 años la que advirtió a su mamá y a Yamila: «Guadalupe no está. Se fue con una nena grande».
La niña es de tez trigueña, tiene cabello lacio, por debajo de los hombros, un lunar en la mejilla izquierda, y al momento de su desaparición vestía una campera parca negra con capucha, buzo rosa y llevaba botas negras. Cualquier dato, comunicarse al 0800-333-5500.
Por su caso, el Ministerio de Seguridad de la Nación emitió el Alerta Sofía, el mecanismo que difunde de manera inmediata la imagen y la información sobre niños, niñas y adolescentes desaparecidos a través de dispositivos móviles y medios de comunicación masivos.
Este miércoles, en tanto, Interpol emitió un alerta amarilla tras conocerse el martes el dato de que la mamá de Guadalupe recibió un llamado con un teléfono con característica de México y aseguró haber escuchado a su hija de fondo.
